Problemas del buen tiempo para nuestro perro

pide cita    917 136 812      info@centrosveterinariosmascoteros.com
Av. de la técnica, 19 Rivas Vaciamadrid

corriendo

El comienzo del buen tiempo suele acarrear algún que otro problema a nuestro mejor amigo.

Las espigas secas, los parásitos, el aumento de la “potencia” solar… y algún que otro propietario despistado, son los mayores peligros.

El comienzo del calor provoca que nuestras mascotas puedan padecer molestos accidentes o lesiones por contacto con agentes específicos de “la temporada”. No debemos asustarnos, pero si debemos tener muy presentes los posibles riesgos, su prevención y la forma de actuación en caso de aparecer el problema. Las espigas secas, los rayos solares, los indeseables parásitos… o los propietarios descuidados son algunas de las principales causas de problemas.

Durante las épocas calurosas la piel de nuestros animales entra en contacto con factores externos a los que, en la mayoría de los casos, no están suficientemente acostumbrados: el sol (más horas de las habituales y de mayor intensidad), el agua de mar o de las piscinas, las arenas de las playas… y todo tipo de insectos y parásitos cuya intención final no es otra que disfrutar de unas estupendas vacaciones en familia sobre la superficie de nuestra “hospitalaria” mascota: los odiosos parásitos externos intentarán un año más hacer la vida imposible a nuestro mejor amigo; las pulgas, las garrapatas y una gran variedad de insectos intentaran aprovecharse de nuestro mejor amigo, y si no ponemos las medidas necesarias, podrán transmitirle graves enfermedades.

Antes de salir de casa, hacia nuestro habitual paseo, el deseado puente o unas merecidas vacaciones, debemos hacer acopio de los productos antiparasitarios que nos recomiende nuestro Veterinario de confianza tras comentarle las características de la zona por la que nos moveremos con nuestro perro.

Pero… Como comentábamos al principio, el despiste del propietario también puede provocar graves riesgos a su amigo… el mejor ejemplo: los golpes de calor.

Todo animal o persona que se encuentra en un lugar abierto o cerrado y está expuesto de forma directa y continua a los rayos del sol, sufrirá una dilatación de sus vasos periféricos; si esto no se ve compensado por un aumento del volumen sanguíneo, provocará un colapso circulatorio y la muerte;  dicho de otra forma: que si dejamos al perro dentro del coche y al sol mientras bajamos a “refrescarnos o aliviarnos” durante un viaje… y no volvemos pronto… podemos encontrar al pobre animalito “totalmente tieso”.

Si a pesar del aviso, somos “un poquito despistados” y provocamos este accidente, debemos intentar “refrigerar” al animal con urgencia: bañar con agua fría, hielos en axilas e ingles y acudir inmediatamente al veterinario.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

You may use these HTML tags and attributes: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>

CONTÁCTANOS

Introduce tus datos de contacto y te responderemos lo antes posible.

Enviando